Todas las entradas de Violeta Garrido

Sanguínea. Aullido Literatura. Violeta Garrido.

La sangre y el deseo

Escribe | Violeta Garrido Editorial: Candaya (2020) Título: Sanguínea Autora: Gabriela Ponce Nº de páginas: 157 Idioma original: castellano Desde Hegel existe consenso en que el deseo fundamental que guía al ser humano es el deseo de reconocimiento: deseamos ser reconocidos por el otro; deseamos,

Una escritura del llanto, reseña de El libro de las lágrimas. Heather Christle. Por Violeta Garrido en Revista Aullido. Literatura y Poesía.

Una escritura del llanto

El libro de las lágrimas (The Crying Book) se presenta ante el lector o lectora como una pequeña enciclopedia personal del llanto, que inicialmente toma la forma de un anecdotario, de un recipiente de curiosidades históricas o sociológicas en torno a la manifestación fisiológica de la tristeza.

Viaje sentimental. Recuerdos de 1917-1922 de Viktor Shklovski

Viaje sentimental: entre la crónica y el relato

Escribe| Violeta Garrido  [symple_divider style=»solid» margin_top=»20″ margin_bottom=»20″]                 Editorial: Capitán Swing (2019) Nº de páginas: 383 ISBN: 978-84-120644-1-4 Traducción de Julia Dobrovolskaya y Alexander Klimin Idioma original: ruso En una época, la nuestra, marcada desde el punto de vista

Die Wunde Heine

Escribe| Violeta Garrido Heinrich Heine actúa desde y con el Romanticismo contra el Romanticismo. Sin embargo, no debería hacerse de este enunciado —sobre el que, por otra parte, se ha insistido en diversas ocasiones desde el ámbito académico dedicado a este periodo y a este

El «yo» en Góngora: una soledad sonora

Escribe| Violeta Garrido Palabras de cristal y brisa oscura, redondas, sí, los peces mudos hablan. (Federico García Lorca, Soledad insegura) Baudelaire, en su Diario, escribe que toda la poesía oscila entre dos términos contradictorios: la vaporización y la centralización del Yo: «De la vaporisation et

« Los justos »: la muerte como dilema

Escribe| Violeta Garrido   Si la disciplina filosófica nos permitiera por un día la licencia de aunar en un solo ente las categorías inmanencia y trascendencia, si es que puede acometerse tal desafío, el resultado nos conduciría irremisiblemente hasta Los justos (Les justes,1949) de Albert